Joven apicultora leridana apasionada por el territorio y por el producto de proximidad. En el 2016 me adentré en el mundo de la apicultura, donde conecte con la naturaleza y la producción de miel ligada al consumo de nuestras familias. Mi apuesta es que todo el mundo pueda disfrutar de un producto hecho en nuestra tierra, por eso trabajo con la floración leridana, trashumando en diferentes épocas del año y diferentes altitudes. Trabajo toda la miel en frío, sin aplicar ningún proceso térmico.