Es el embutido del cerdo por excelencia de los tocinos catalanes, destinado a la comercialización en fresco. Tradicionalmente, era uno de los primeros productos de la matanza del cerdo, que se consumía en seguida o se conservaba confitada en tupinas.
Es un embutido crudo que se elabora con las carnes más nobles del cerdo: carne de hombro o de muslo y tocino viaja, ensaladas con sal y pimienta negra. Se embute en un buñuelo de cerdo, se liga y ya queda lista para la comercialización.
Es un producto emblemático y se convierte en protagonista de platos típicos de la gastronomía catalana, como la butifarra con judías, las cocas de recapte, a la brasa, esparracada con setas...
Se comercializa fresca en todas las charcuterías y tonterías de Cataluña.
Elaborada a base de carne y grasa del cerdo, es un alimento energético, rico en proteínas de alto valor biológico y vitaminas del grupo B. También se destaca un contenido importante de hierro. Dentro de una alimentación variada y equilibrada, su consumo semanal es totalmente aconsejado.